Reseña · El principe roto · Erin Watt

Ficha del libro

Opinión

Tras el intenso final de La princesa de papel no veía el momento de poder saber cómo continuaba la historia de Ella, y su tormentosa relación con los Royal. Así que nada más salir a la venta esta segunda entrega de la trilogía me puse con ella. Me ha parecido un libro más pausado que el primero, pero una vez más sus autoras vuelven a utilizar potentes giros de trama para dejar la novela en el punto más álgido y que tengas ganas de más.

En la primera entrega veíamos cómo toda la vida de Ella cambiaba de la noche a la mañana. Pasó de vivir con lo justo a tener todas las comodidades, lo único es que para tenerlas debía formar parte de la familia Royal, una familia en la que sus 5 hijos la veían como una amenaza sobre todo Reed, por el que empieza además a sentir una fuerte atracción. Justo en el momento en el que todo parecía encajar sufrió el mayor mazazo que podía recibir por parte de Reed, y acaba huyendo de todo e intentando comenzar nuevamente su vida en solitario. Pero Callum Royal no permitirá que la hija de su mejor amigo Steve vague sola por el mundo, y utilizará todos los medios a su alcance para hacer que vuelva bajo su techo.

Cuando Ella regresa los Royal no son su única preocupación, ya que también deberá lidiar con las malas artes de Brooke y Dinah, y aguantar todo tipo de situaciones vejatorias de parte de los alumnos del Astor Park. El mandato de los Royal parece que ha concluido, ya que Reed se ha relajado demasiado dejando que todos camparan a sus anchas. Si quieren recuperar el liderazgo sobre todos los alumnos deberán tomar medidas rápidamente, o la situación será insostenible.

—Te he echado de menos cada segundo que no has estado aquí. No he dejado de pensar en ti. ¿Quieres odiarme por lo que hice? No te molestes. Yo ya me odiaba por ello mucho antes de que tú aparecieras en mi vida. Me acosté con Brooke, y es algo con lo que he de vivir el resto de mi vida. —Sus dedos tiemblan contra mi mentón—. Pero no me la tiré aquella noche, y no voy a dejar que eches por tierra lo que tenemos solo porque…
—¿Lo que tenemos? No tenemos nada. —Siento náuseas otra vez. Ya estoy harta de esta conversación—. Sal de mi habitación, Reed. Ni siquiera soy capaz de mirarte a la cara ahora mismo.
Cuando veo que no se mueve ni un centímetro, planto ambas manos en su torso y lo empujo con fuerza. Y sigo empujándolo, haciendo fuerza contra su pecho musculoso hasta que consigo llegar al umbral de la puerta. La ligera sonrisilla en su rostro no hace más que pronunciar mi enfado. ¿Acaso le parece gracioso? ¿Para él todo es un juego?
—Sal —ordeno—. No tengo nada más que hablar contigo.
—Claro, me voy, si eso es lo que quieres. —Reed arquea una ceja y añade—: Pero esto no se ha acabado, Ella. Ni de lejos.

Aunque la historia discurre siempre alrededor de la trama central entre Ella y Reed, en esta novela volvemos a tener mucha influencia del resto de los hermanos Royal. Sabemos más sobre Gideon, Easton, y los gemelos, y creo firmemente que sus tramas darían incluso para hacer una novela (o serie) de cada uno de ellos. Supongo que igual las autoras ya lo tienen en mente.

Una cosa que me encanta de esta serie es el carácter de Ella. Es un carácter fuerte y forjado a fuego, no se deja amilanar por nada y por nadie. Aun sufriendo en su día a día ataques por parte de sus compañeros, y que podrían ser catalogados de bullying a todos los efectos, no se viene abajo y es capaz de defenderse y devolver la pelota a quien sea. También sabe capear los ataques de los adultos que la rodean, y es un personaje que me parece incluso demasiado maduro para su edad, pero totalmente acorde con la vida que Ella ha tenido hasta el momento.

Como ya he indicado más arriba esta segunda novela quizás ha sido para mí menos potente que la primera con momentos mucho más pausados, aun así, me ha tenido dentro de la historia todo el rato. A medida que avanza el libro los acontecimientos se van precipitando algo más, y el final por segunda vez es de infarto. Ahora solo nos queda mordernos las uñas hasta el mes de septiembre, mes en el cual llegará a nuestro país la tercera entrega, titulada El palacio maldito.

El príncipe roto es una novela que nos conduce desde el alocado comienzo de la serie hacia el final de la trilogía, el cual estoy segura de que será de traca. Los Royal guardan muchos cadáveres en su armario, y sus enemigos van a usar todas sus armas para tratar de derrocarlos. Algunos han mostrado ya sus cartas, pero ahora habrá que ver si el reinado ha acabado o por el contrario ha salido más fortalecido. Envidias, venganzas, intereses, engaños, amor y pasión, un cóctel ideal para una buena novela new adult.